Por el Gober Precioso
Después de unas bien merecidas vacaciones retomo el blog sólo para enterarme de que toda la raza maldita del estado fascista-marinista de Puebla me sigue la huella.
Mi estimado Mario Alberto Mejía, en su Quinta Columna transcribe parte de los comentarios que ustedes, amables e indignados lectores, han vertido en este blog, algunos de los cuales se muestran francamente alarmados.
Y no es para menos.
Como lo dije en el primer párrafo de este tema, Puebla es un estado fascista-marinista en donde la libertad de expresión debe ser combatida a toda costa, máxime, si esta libertad la toma un anónimo y abre un blog en el ciber espacio con el fin único de golpear al gober precioso; al ungido por la divinidad de 900 mil votos; al todopoderoso tlatoani, a quien se debe adorar y jamás cuestionar; al dictadorzuelo que se cree con el poder de dirigir, manipular y controlar el destino de los poblanos. Me cae que no hay derecho. Así no se vale. Cómo se me ocurre? En qué estaría yo pensando? He profanado lo más divino del estado fascista-marinista de Puebla. Y ahora, quién podrá ayudarme?
Lo que he venido haciendo desde el día en que fundé este espacio de opinión, es ejercer mi derecho inalienable de expresión. Ni más, ni menos. Pero como me he vuelto demasiado incómodo para la raza maldita, pretenden ingenuamente dar conmigo. Me pregunto por qué? Acaso he cometido algún delito? Para nada, pero tienen que hacer gala de autoridad, de poder y de fuerza, porque ya nadie les respeta, porque ya nadie siente que Puebla tenga un gobernador. Además, qué nadie les ha explicado cómo funciona el internet? Porque hay que ser cándido para pretender ubicarme.
Les explico la razón.
La raza maldita da muchas cosas por sentado. En primer lugar, que estoy escribiendo en Puebla. En segundo lugar, que soy UNA sola persona. En tercer lugar, que uso mi conexión personal para leer mis mensajes y para subir temas al blog. Me cae que hay que ser ingenuo para llegarle a Telmex y a MegaRed, y preguntarles si alguien me ha visto. Ya me imagino las caras de los directivos locales de ambas empresas; las burlas deben haber sido apoteósicas.
Pero saben qué es lo que más coraje me da de la actitud fascista del gobierno marinista? Que están usando mis propios impuestos para ubicarme. Sublime ironía, no es cierto? Se sienten como la Gestapo y la KGB en sus mejores tiempos. Ya quisieran esos zoquetes parecerse un poquito a ambas policías secretas. Usen su tiempo y mis impuestos en reparar baches y pavimentar calles en la sierra negra, en vez de hacer el ridículo por enésima ocasión. Me cae que no hay derecho.
Cambiando de tema...
Qué agradable fue enterarme de que las vacaciones no le quitaron su ritmo al blog. En sólo 10 días desde que marcamos las 100 mil visitas únicas, hemos alcanzado las 130 mil visitas únicas. Increíble. Y eso que preferí no escribir nada desde las recuperadísimas playas de Cancún, para evitar que la tropa sospechara algo. Por cierto, han ido al Coral Beach? Qué hotel!!!
Nuevamente quiero agradecer a todos ustedes, amables e indignados lectores, que son quienes hacen posible que este blog tenga vida propia. Y ya lo saben, corran la voz, no dejen que esto se olvide.
PD. Te lanzo un reto, mi gober precioso. A ver quién dura más tiempo: tú, en Casa Puebla, o yo, en Blogger. La apuesta son dos bellísimas botellas de cognaq.
